Si una vida en pos de lo justo es ya de por sí una gran obra de Historia, la de Ignacio Hidalgo de Cisneros merece una revisión y una reflexión muy especial. Aristócrata, mitad vasco, mitad riojano, militar, africanista y bon vivant, supo ahondar en las contradiccione de su clase y, en su coherencia ideológica, se incorporó a las filas republicanas donde, por su capacidad y entrega, fue un personaje siempre y un héroe cuando tuvo que serlo. Apostó y perdió. Acabó, como tantos exiliados, vacío y transterrado, vagando sin raíces más allá de la esperanza. Sólo le quedó la escritura para retrato de su mundo y radiografía de su transformación personal. En esta interesante autobiografía, vital y optimista, da cuenta de las consequencias de su opinión y al contar la historia de su particular Cambio de Rumbo, contó también la de una España que pudo ser y no fue.